Luego de la visita del Presidente francès, François Hollande en febrero pasado, el presidente de Estados Unidos Barack Obama está de visita por la Argentina esta semana, y con una nutrida agenda.
Tanto como para la cena de gala en honor al presidente francés, como para la del presidente de Estados Unidos, la empresa elegida para llevar adelante la cena diplomática, de la cual participaron 500 invitados, es Eat catering, cuya cocina esta dirigida por el reconocido chef y miembro de Lucullus, Bruno Gillot.
En su primer día en el país, Obama visitó la Catedral de Buenos Aires y encabezó un “encuentro informal” con jóvenes emprendedores en la Usina del Arte, donde brindará un discurso; mientras que por la noche será recibido por el presidente Macri en una cena oficial en el Centro Cultural Kirchner (CCK).
La cena fue pensada con un perfil muy autóctono, con productos como el dulce de leche y el malbec mandocino.
Despues de un cocktail de recepción, el menú comenzó con un crocantin de trucha ahumada y zuccchinis marinados con menta, tomates secos y aioli de lima, acompañados por vino un Angélica Zapata Chardonnay. Luego, se sirvió el jarret de cordero horneado lentamente, papas «dominó», crema de berenjena ahumada y ensalada de tomates «antiguos», maridado con un Angélica Zapata Malbec Alta. El postre fue un volcán de dulce de leche, para el que se eligió el Catena Espumante Nature de la bodega Catena Zapata.