28.08.2012. La diplomacia también está en el plato: el «Club des Chefs des Chefs» fundado por Gilles Bragard reúne los cocineros de los dirigentes. Cada año se juntan en un lugar distinto para descubrir la gastronomía del país visitado. Este año fue entre Alemania y Francia que se celebró el encuentro anual de este Club que se proclama como «la asociación gastronómica más exclusiva del mundo».
Reglas de adhesión estrictas. El Club des Chefs des Chefs (CCC) ha sido fundado en el año 1977, en Collonges-au-Mont d’Or, en el restaurante de Paul Bocuse, el legendario templo de la gastronomía, con la presencia de los cocineros personales de varios Jefes de estado. Desde entonces, los Chefs des Chefs se reúnen anualmente en un país distinto, para descubrir la gastronomía local y participar en diversas manifestaciones culinarias destinadas a asegurar la promoción del oficio de cocinero. Para ser admitido en este club muy exclusivo, es necesario ser «el cocinero personal, en ejercicio, de un jefe de estado […] Se admite un solo miembro por país, excepto para China que dispone de dos sedes.» Gilles Bragard explica su ambición: «Cuando creé el CCC, mi proyecto era rendir homenaje a los cocineros de los Jefes de estado: son grandes Chefs que trabajan detrás de la escena.»
Diplomacia culinaria. Recibidos el mes pasado en el Palacio del Elysée –la Casa Rosada francesa– el presidente francés François Hollande dijo, acerca de los cocineros: «Ustedes tienen un oficio muy difícil y muy exigente, pero muy útil para los relaciones internacionales». Christian Garcia, cocinero del Prince Albert II de Monaco, subraya que el club le permite a sus miembros «informarse más fácilmente sobre los gustos de los Jefes de Estado y recibirlos en las mejores condiciones posibles». Los chefs de los Jefes de estado juegan un papel importante en las funciones diplomáticas internacionales al ser responsables de la excelencia en la mesa que reúne a los líderes del planeta en grandes encuentros: crear una atmósfera distendida en torno a la mesa permite a menudo acercar posiciones. La máxima de los Chefs des Chefs es: « Si la política divide en ocasiones a los hombres, una buena mesa siempre los acerca».
Embajadores gastronómicos. Además de esta función diplomática, el CCC tiene como valores la defensa y la promoción de las tradiciones culinarias de cada país representado, así como la misión de preservar las raíces de la cocina nacional. Los chefs de los Jefes de estado deben dar prioridad a los productos, las tradiciones culinarias y el arte de recibir de su país. En este sentido, son embajadores de su gastronomía.
Pequeños secretos culinarios. Los cocineros están al tanto de todas las manías de los altos dirigentes. El Príncipe Albert de Mónaco come sano y orgánico, sobre todo verduras de su propia huerta. En cuanto a Michelle Obama, ella pone el acento sobre los productos frescos y las comidas equilibradas. Asimismo, la primera dama de los Estados Unidos lucha activamente contra los problemas de obesidad en su país. En cuanto al Chef cocinero de François Hollande, Bernard Vaussion, revela que al igual que Nicolas Sarkozy, a su predecesor le encantan los chocolates. El chef francés fue recibido por el nuevo presidente el día mismo de su investidura, el 15 de mayo pasado: pescados marinados y asados han sido en seguida integrados en el menú y los quesos están de vuelta sobre la mesa presidencial después de haber hecho prohibido durante el mandato presidencial anterior. Este cambio podría apaciguar las relaciones con Alemania: Angela Merkel prefiere un bueno queso a un postre dulce…
Antoine Duriez.
