21.02.14 La raw-food, o comida cruda, es un movimiento dietético gastronómico que fue creado primero por varios médicos del mundo y luego por teóricos como Ann Wigmore en los años 1950 en Boston[c1] , con la fundación de un instituto cuyo objetivo era ayudar a la curación de personas enfermas de cáncer gracias a la alimentación. Este instituto alcanzó resultados concluyentes y la tendencia llegó en los años 1970 hasta California y más tarde al resto del mundo con un aspecto más « gourmet » que curativo.
La raw-food es en primer lugar una promesa de salud o de longevidad, pero también representa una experiencia gustativa que permite descubrir nuevas maneras de cocinar. Sin tirar a la basura nuestros hornos, parillas y sartenes, te proponemos descubrir la comida cruda e inspirarte de algunas ideas para reinventar tu cocina diaria.
¿La raw-food, qué es?
Comer todo crudo puede parecer un poco austero. Para muchas personas suena a régimen para bajar de peso, sin embargo la comida cruda también puede ser golosa. Si dejamos los clichés de un régimen rígido y anti-gastronómico veremos que la raw-food permite reencontrar el sabor verdadero y simple de los ingredientes. Es una nueva experiencia gustativa: por ejemplo, las arvejas o los espárragos tienen un sabor muy distinto que los comamos crudos o cocidos.
Una filosofía culinaria
Más allá de comer solamente ingredientes crudos, la raw-food es también una filosofía culinaria. Raw significa en inglés crudo, bruto, vivo, al estado salvaje o sea más que una simple oposición a cocido. El verdadero sentido de la raw-food es comer alimentos que no sean industriales, ni estén refinados para aprovechar al máximo su sabor natural y sus beneficios para la salud. Un alimento que está cocido pierde la mayor parte de sus nutrimentos, como por ejemplo las enzimas que permiten una mejor digestión. Sin estas enzimas, los alimentos son más pesados y más difíciles de digerir, el cuerpo tiene entonces que gastar mucha energía para lograrlo. Los adeptos de la raw-food dicen que con esta alimentación sienten que sus cuerpos no gastan energía inútilmente.
Hay que precisar que la raw-food es también una dieta vegetariana porque según los creadores de esta cocina, el cuerpo no necesita productos de origen animales. La leche de vaca es remplazada por leche de nuez o de almendras.
La sopa india: un ejemplo de raw-food a hacer en casa
La raw-food se adapta bien al verano porque muchas de sus recetas son muy frescas. Te proponemos una receta de sopa fría llamada Sopa India: cortar y mezclar dos zapallitos crudos y dos tomates. Añadir un jugo de limón verde, una cuchara de cilantro, una cuchara de comino, dos cucharas de aceite de sésamo y procesar. Antes de servir, agregar unas rodajas de pepino (ver primera foto izquierda) y espolvorear con una cuchara de semillas de carvi y media cuchara de cúrcuma.
¡Buen provecho!
