Los postres de las fiestas!

14.12.2012. Las fiestas de fin de año representan en Francia la “Trêve des Confiseurs” (la tregua de los confiteros), en referencia a la tregua invernal entre Navidad y año nuevo, período tradicionalmente propicio a las artes de la mesa y más particularmente a las de los confiteros. Enfoque sobre los dulces navideños tradicionales de Francia.

Una tregua para todos, excepto para los golosos. Durante la semana que transcurre entre Navidad y año nuevo, las calles de Francia experimentan una relativa calma después del apuro previo a Navidad. La expresión “Trêve des Confiseurs” se refiere al hecho que desde 1875, tanto la Asamblea Nacional como el Senado no se reúnen durante ese período. La anécdota dice que en diciembre del 1874 durante los intensos debates acerca de la constitución de la Tercera República, monárquicos, bonapartistas y republicanos buscaron un acuerdo y juzgaron que el período de fin de año era poco propicio a los debates apasionados. En la época, la prensa se burló de la que rápidamente fue bautizada la “tregua de los confiteros”. Hoy en día, el mundo del fútbol – para razones meteorológicas – y los mercados financieros también se toman esos días de descanso.

La insuperable “Bûche de Noël”. En el menú del réveillon de Noël, esa torta en forma de leña tiene un lugar privilegiado. La bûche está presente en las mesas de Francia, de Bélgica y de forma más difusa en las regiones francófonas tales como Vietnam, Líbano o Quebec. La tradición proviene de un rito pagano vinculado con la celebración del solsticio de invierno – en el hemisferio norte – que consiste en quemar una leña en el hogar de la chimenea durante por los menos tres días. Un tronco de un árbol frutal para asegurarse una buena cosecha, o regado de vino para buenas vendimias. Ahora, cada año la bûche de Noël es objeto de nuevas interpretaciones por parte de los pasteleros que despliegan extravagancia y exquisitez para poner al día ese postre tradicional.

 Les treize desserts de la Provence. Los trece postres consisten en un postre tradicional de la gastronomía francesa que se sirve en Navidad en la región de Provenza y representa a los doce apósteles y a Jesús. Los postres servidos suelen ser trece pero la composición de los mismos puede variar en cada familia de acuerdo con la tradición familiar. Generalmente, los cuatro primeros se suelen denominar los “quatres mendiants” (cuatros mendigos) y representan las cuatro órdenes monásticas mendicantes: pasas, nueces o avellanas, higos secos y almendras para los Dominicos, los Agustinianos, los Franciscanos y las Carmelitas. Siguen la frutas frescas con manzanas, peras, naranjas, sandias y uvas. Luego los dulces como los Calissons d’Aix (pasta de almendras con azúcar impalpable, de la cuidad de Aix-en-Provence), los caramelos de limón, dos tipos de nougat (dulce parecido al turrón español) para simbolizar a Dios y el Diablo, y la fougasse con aceite de oliva (pastel dulce elaborado con brioche y aromatizado con agua de azahar y aceite de oliva)… Y también galletas saborizadas con comino, pain d’épices, tortas fritas… Una verdadera profusión de postres!