13.05.14 ¿Un distribuidor automático de baguettes? Es la nueva invención del panadero francés Jean-Louis Hecht, de 57 años, quien acabó de ganar el famoso concurso francés Lepine. Este concurso ha sido organizado desde 1901 en Paris, con la meta de recompensar las innovaciones más revolucionarias, como el primer aspirador con filtro o el bolígrafo. ¿Cómo funciona esta máquina automática y qué tipo de revolución representa realmente el distribuidor de pan? Todas las respuestas a sus consultas en este artículo.
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Hacia la distribución automática de pan
El dispositivo consiste en un armario masivo dividido entre una cámara frigorífica reglada sobre 8 grados, donde se puede conservar hasta 120 baguettes pre-cocidas por algunos días; esta cámara está unida a un horno y a otra cámara caliente (39 grados). El consumidor inserta una moneda de 1 euro en la maquina, y empieza el proceso: en 10 segundos se acaba la cocción del pan y el cliente recibe una baguette bien dorada y crocante, como si saliera directamente de la panadería.
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El dispositivo, patentado bajo la apelación de “Pani Vending”, queda bajo la vigilancia de un sistema de mantenimiento a distancia, diseñado especialmente para este producto y controlado desde una computadora o un Smartphone.
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Una ventaja para las panaderías
Jean-Louis Hecht concibió está idea una noche, cuando ya había cerrado su tienda y sus clientes seguían pidiéndole más pan. Según él, el “Pani Vending” permitiría a la vez reducir las filas de espera dentro de las panaderías, y acercar las baguettes a pueblos bastante aislados o en las comunes despobladas donde tuvieron que cerrar las panaderías por falta de clientes.
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Un producto en plena expansión
¿Dónde se puede probar una baguette de distribuidor automático? Por ahora, las veinte primeras maquinas “Pani Vending” fueron instaladas en el Este de Francia, y el primer país donde se exportó es a Rusia, con unas 4 maquinas instaladas en Moscú. Unos primeros resultados fueron registrados en una panadería cerca de Paris que dispuso varias maquinas en puntos estratégicos, y ya vendió unas 11.000 baguettes de esta manera y logró amortizar su inversión de 55.000 euros en menos de un año.
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Así el “Pani Vending” parece prometedor, desde el punto de vista de los panaderos como de sus clientes, y fue sancionado por el premio Lepine de la mejora invención del año. A modo de conclusión, Jean Louis Hecht calcula su volumen de negocios en un millón de euros este año, y no esconde su aspiración a desarrollar sus maquinas y la tradición de la baguette a través del mundo.
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Más información en: http://www.panivending.com/
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Maud Legros
